La Autoridad Aeroportuaria de las Islas Caimán ha iniciado el proceso de contratación de diseñadores para elaborar planes para las controvertidas mejoras propuestas para las áreas externas de la Terminal de Aviación General del Aeropuerto Internacional Owen Roberts. Se ha enviado una invitación a diseñadores en el sitio de adquisiciones gubernamentales en busca de consultores para trabajar en la plataforma de estacionamiento, el helipuerto y un muelle marino adyacente a la plataforma este existente y el North Sound. Esta es la Fase 1 del proyecto de 42 millones de dólares que incluirá un nuevo edificio terminal en la Fase 2 y un hangar de aviones en la Fase 3.
El proyecto propuesto generó controversia en la comunidad ya que esta terminal rara vez es utilizada por los caimaneros o la mayoría de los turistas. Atiende aviones privados sólo con sus propietarios y pasajeros muy ricos, y ha sido difícil identificar a partir del esquema de caso de negocios la justificación del proyecto, que según el Ministro de Turismo Kenneth Bryan era atraer a más personas de alto patrimonio neto a las Islas Caimán.
Mientras tanto, el hacinamiento durante los períodos pico en la terminal regular recientemente desarrollada sigue siendo una molestia para la gran mayoría de los pasajeros aéreos, y muchos creen que la atención debería centrarse en esto y en la incorporación de pasarelas.
El Departamento de Medio Ambiente indicó en una opinión de alcance que no es necesaria una evaluación de impacto ambiental para este proyecto. Sin embargo, la CIAA debería considerar reemplazar al menos 1,5 acres de manglares a lo largo de la costa de North Sound del aeropuerto para mitigar la pérdida de otros tres acres de manglares que serán sacrificados para esta instalación.
El Departamento de Energía también señaló que el proyecto parece completamente desconectado de la política de Caimán en relación con las emisiones de gases de efecto invernadero, dado que la ampliación de esta terminal conduciría inevitablemente a la llegada de más aviones privados a Caimán, que contaminan más per cápita que los aviones comerciales modernos.
Esto planteará dudas sobre las desigualdades, dado que la Política Energética Nacional tiene nuevos objetivos para reducir las emisiones en las tres islas. Si una mayor actividad de aviones y vehículos en esta nueva terminal genera más gases de efecto invernadero, entonces otros sectores de la comunidad tendrán que reducir aún más sus emisiones para compensar.
“Dado que la Terminal de Aviación General sólo es utilizada por una pequeña proporción de la población de Caimán, es probable que exista un problema de igualdad”, afirmó el Departamento de Energía. “La mayoría de la población se está viendo afectada por el cambio climático, pero sólo un pequeño número utilizará las nuevas instalaciones o será responsable del aumento de las emisiones”.
El departamento también advirtió que el diseño de este proyecto, dada su proximidad a la costa, deberá considerar los impactos inevitables, incluso a corto plazo, del aumento del nivel del mar en Caimán y la cuestión de las marejadas ciclónicas y las inundaciones.
El proyecto consiste en la construcción de una plataforma de estacionamiento de aeronaves flexible y no flexible de aproximadamente 70.000m², una plataforma de helipuerto de aproximadamente 10.500m² y un pequeño muelle marino con malecón. La plataforma consistirá en una conexión a las calles de rodaje G y H existentes. El alcance del diseño incluirá todos los caminos de acceso, servicios subterráneos y obras externas necesarias, como se describe en el diseño conceptual incluido en el Plan Maestro CIAA 2041.
