Autoridades y otras fuentes han alertado que las paradisiacas Islas de la Bahía (Caribe hondureño), se habrían convertido en blanco o refugio de bandas dedicadas a la pornografía infantil y trata de personas.
Para el caso, organismos policiales y judiciales han desarticulado agrupaciones integradas por nacionales y extranjeros dedicados a raptar jovencitas que posteriormente son explotadas sexualmente, según algunas autoridades de la Policía Nacional.
Es un secreto a voces que en esa zona insular explotan, abusan y comercializan a los jóvenes, señaló la directora de la Comisión Interinstitucional Contra la Explotación Sexual Comercial y Trata de Personas de Honduras (CICESCT), Sua Martínez.
BANDAS EXTRANJERAS
El velo de impunidad quedó al descubierto tras la desaparición de la joven capitalina Angie Peña, quien permanece como desaparecida desde el 1 de enero del 2022, cuando disfrutaba de unas vacaciones en Roatán.
En relación a este caso, guardan prisión Harold Green y William James Murdock, quienes son acusados de trata de personas en su modalidad de venta en perjuicio de la hondureña Angie Peña.
Por el mismo caso guardan prisión preventiva Gustavo Trejo y Gary Lee Johnston, ambos por los delitos de asociación para delinquir. Gary Lee Johnston ya guardaba prisión por otro caso de trata de personas y pornografía infantil y cuando fue detenido en 2022, lo encontraron junto a una menor.
Los supuestos implicados en el caso de Angie Peña continúan en la cárcel tras conocer la resolución de un juez en su audiencia inicial.
Fue el jueves -19 de abril- cuando se les dio captura a estas personas, dos extranjeros y un hondureño, presuntamente miembros de una estructura criminal vinculada al caso de Angie Peña, caso mediante el cual las autoridades hondureñas buscan desentrañar la trata de personas en esa región.
SILENCIO CÓMPLICE
Al respecto, la funcionaria gubernamental, Sua Martínez reconoció la grave situación que ocurre en Islas de la Bahía, desde hace muchos años con un silencio cómplice de muchas personas que habitan en esa zona insular.
De acuerdo con la funcionaria, por años ha estado escondido el delito coludido por personas que ahí convergen, inclusive autoridades de esa zona.
“Las mismas chicas rescatadas afirman que les toman fotografías y las colocan en catálogos para luego ser comercializadas”, señaló.
Se indicó que las penas contra el delito de trata de personas van de diez a 15 años de cárcel.
REFUERZO POLICIAL
Los tratantes de personas han mutado sus operaciones y ahora lo hacen a través de plataformas digitales para llegar a las comunidades de jóvenes.
Frente al flagelo, la CICESCT se ha fortalecido y de contar con ocho millones de lempiras de presupuesto pasó a 30.5 millones.
Con estos fondos se ha permitido la contratación de personal especializado para empujar las acciones de esa oficina que lucha contra la trata y explotación sexual en Honduras.
La trata es un delito lucrativo, el tercero en el mundo, sin embargo, ahora hay institucionalidad para atacar el flagelo en que, según los últimos casos, están coludidas autoridades y operadores de justicia.
De igual manera, la Policía Nacional se ha unido a ese combate a la trata de personas en la zona insular, porque hace 15 días reforzó sus unidades que operan en la región.
Un total de 75 agentes policiales, entre ellos varios detectives de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) fueron desplazados a Roatán, Guanaja y Utila, todo con el fin de combatir el flagelo, informó el director de la Policía Preventiva, Miguel Pérez Suazo.
DATOS
Solo en 2023 fueron rescatadas 105 personas de las redes de trata y explotación sexual comercial, y durante el 2024 suman cinco personas liberadas. La CICESCT dispone de la línea 8990-5187 para recibir denuncias relacionadas con la trata y la explotación sexual comercial.
