Un joven de 26 años originario de Wuhan, China, se ha convertido en la persona más obesa de la ciudad al subir más de 100 kilos tras pasar 5 meses encerrado en su casa por la cuarentena impuesta por la pandemia del COVID-19.
El hombre identificado como Zhou, tuvo que ser ingresado al hospital Zhongnan debido a que presentaba problemas de salud por su aumento de peso.
Zhou, quien trabajaba en un cibercafé, siempre ha tenido que luchar contra el sobrepeso. Antes de que iniciara la pandemia, el hombre pesaba cerca de 180 kilos, pero de enero a mayo subió a 280.
Su familia llamó a los servicios de emergencia ya que llevaba 48 horas sin dormir y además, presentaba otros problemas a tal grado que apenas si podía hablar. Tras practicarle varios estudios, los médicos descubrieron que padecía una insuficiencia cardíaca y disfunción respiratoria, por lo que tuvo que permanecer en cuidados intensivos 9 días.
Por fortuna, su situación mejoró y ahora se encuentra en sala general del hospital, terminando de recuperarse. De momento, no se ha dicho el por qué ganó tantos kilos a lo largo de estas semanas, llevándolo a convertirse en la persona más obesa de todo Wuhan.
Ahora, para salvarle la vida, los doctores indicaron que debe someterse a una cirugía pero no se la pueden practicar ya que debe perder cerca de 25 kilos para poder hacérsela sin ningún riesgo.
Seguramente que millones de personas en el mundo entero están teniendo que lidiar con los efectos de la cuarentena, siendo uno de los más notables y uno de los que más preocupa el tema del peso.
Hay quienes seguramente notarán que han perdido algunos kilitos o libras, mientras que la mayoría aseguran que el estar encerrados en casa ha hecho que coman constantemente y quizá de forma no tan saludable, por lo que los expertos en nutrición han calculado que, en promedio, una persona podría ganar hasta 6 kilos durante el confinamiento.