Macron critica el “fracaso moral” de los políticos libaneses al cumplirse un año de la trágica explosión en Beirut
El mandatario francés también prometió que su país entregará una ayuda de más de 118 millones de dólares y 500.000 vacunas al país árabe.
Al cumplirse un año de la trágica explosión en el puerto de Beirut, en Líbano, el presidente de Francia, Emmanuel Macron criticó a la clase política del país árabe por su “fracaso moral” que ha permitido que la nación profundice aún más su crisis social y económica.
“Los líderes libaneses parecen apostar por una estrategia estancada, que lamento y creo que es un fracaso histórico y moral“, declaró el mandatario francés durante la apertura de una conferencia internacional de donantes que busca recaudar al menos 350 millones de dólares para contribuir a la recuperación del país.
Francia ha liderado durante los últimos meses los esfuerzos internacionales para sacar a su antigua colonia de la crisis social y económica, que se agravó drásticamente a raíz de la explosión que arrasó el puerto de Beirut. Las secuelas de la detonación dieron como resultado la renuncia del Gobierno en funciones, lo que creó un vacío político que sigue vigente, porque aún no se ha logrado formar un nuevo Gobierno permanente que haga frente a los problemas.
En ese sentido, Macron aseguró que “no habrá ningún cheque en blanco para el sistema político libanés”. “Porque son ellos los que, desde el inicio de la crisis, pero también antes de eso, están fallando” acotó, recordando a los líderes libaneses que le deben a su pueblo la verdad de lo sucedido.
El mandatario francés también prometió una ayuda de 100 millones de euros (más de 118 millones de dólares) como ayuda de emergencia para el Líbano y 500.000 vacunas para que la nación pueda paliar los efectos de la pandemia del covid-19.
Por su parte, el presidente de Líbano, Michel Aoun, se mostró de acuerdo con las preocupaciones de su par francés y expresó su deseo de formar un Gobierno que sea capaz de implementar las reformas requeridas, recordando que su país “está atravesando actualmente los momentos más difíciles”.
El desastre, que ocurrió el 4 de agosto de 2020, fue una de las mayores explosiones no nucleares en la historia. La tragedia dejó alrededor de 200 víctimas mortales y unos 6.000 heridos, así como destruyó los hogares de decenas de miles de personas. Un reciente informe mostró que, debido a la corrupción y mala gestión en el puerto, toneladas de nitrato de amonio se almacenaron de forma peligrosa durante casi seis años antes de la tragedia.
