El gobernador Martyn Roper ha ofrecido su apoyo a los proyectos de ley que obligarán a los titulares de permisos de trabajo a vacunarse contra el COVID-19 si quieren seguir trabajando en Caimán o ocupar un nuevo puesto aquí. En un comunicado emitido por su oficina el miércoles, Roper dijo que era consciente de que el tema era emotivo y que había recibido varias cartas “de varias personas al respecto”, pero que las leyes eran “razonables, racionales y proporcionadas”.
Respondiendo a la correspondencia, dijo que el gobierno estaba lidiando con una emergencia de salud pública y haciendo todo lo posible para proteger a la comunidad y reducir las presiones sobre los servicios de salud.
“Impulsar las tasas de vacunación aún más es una herramienta importante en nuestro arsenal”, dijo. “Si las personas desean disfrutar de los privilegios de la ley de inmigración y solicitar un permiso de trabajo o la renovación de un permiso de trabajo, una de las condiciones que deben cumplir es demostrar que están vacunados o que no pueden vacunarse por razones médicas u otra exención permitida por la ley”, dijo Roper.
“No existe ningún derecho bajo la ley a un permiso de trabajo y no existe una expectativa legítima de renovación”, agregó, haciéndose eco de los comentarios hechos por el fiscal general en la Cámara del Parlamento esta semana.
“La política del gobierno es que si desea trabajar en las Islas Caimán y necesita un permiso de trabajo, entonces está obligado a demostrar una serie de cosas. Esto ahora incluirá que está vacunado contra COVID-19”, dijo el gobernador.
Sin embargo, señaló que Cayman tiene un sistema judicial independiente que permite al público ventilar sus quejas en los tribunales.
“La capacidad de impugnar la compatibilidad de la legislación a través de los tribunales existe para todos”, dijo. “Si hay un desafío legal, el gobierno tendrá que justificar la legislación y el poder judicial determinará su compatibilidad con nuestra Constitución y Declaración de Derechos”.
Roper agregó: “La preocupación del gobierno, que comparto, es hacer todo lo posible para apoyar la salud y el bienestar de todos en la isla para que podamos reabrir la frontera de manera segura. Todos tenemos que vivir con COVID en el futuro. Estos proyectos de ley respaldarán ese resultado y espero que la comunidad pueda unirse para ayudar a lograrlo”.
