Docenas de familias tuvieron que entrar en cuarentena inesperada la semana pasada después de un brote de COVID-19 en la Escuela Primaria de George Town, pero muchas de ellas no pudieron llegar a los supermercados antes de que comenzaran la cuarentena y se quedaran sin suministros. Como resultado, se alistó al Regimiento de las Islas Caimán para ayudar a llevar comestibles y otros artículos a las familias durante el fin de semana con la ayuda de varias otras agencias gubernamentales y la cadena de supermercados Foster.
El primer ministro Wayne Panton dijo en la conferencia de prensa del viernes que el gobierno sabía que las familias estaban encerradas antes de que tuvieran la oportunidad de prepararse y pudieran necesitar ayuda. Dijo que todos los ministerios pertinentes se iban a asegurar de que “se abordaran las preocupaciones muy legítimas”.
Para el sábado, el regimiento se había desplegado para entregar alimentos y agua a 120 hogares en Grand Cayman. Los vehículos del regimiento fueron cargados por cuatro equipos de reservistas en la ubicación de Camana Bay Foster y enviados a las familias.
