Ambas compañías mantienen una asociación exclusiva desde hace 10 años.
La compañía de artículos deportivos Reebok ha anunciado su separación de CrossFit tras un tuit que el consejero delegado y fundador de esa marca de entrenamiento, Greg Glassman, publicó el pasado fin de semana.
Ese alto ejecutivo comentó una publicación sobre racismo de manera polémica al alterar el nombre de la pandemia: sustituyó la palabra ‘covid’ por ‘Floyd’, el apellido del afroamericano que murió bajo custodia policial el pasado 25 de mayo en Mineápolis (Minesota, EE.UU.).
Glassman reaccionó de ese modo a un comunicado del Instituto de Métrica y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington, en el que ese organismo aseguró que “el racismo es un problema de salud pública”.
“Su modelo fallido nos puso en cuarentena ¿y ahora van a modelar una solución al racismo? El brutal asesinato de George Floyd provocó disturbios en todo el país. La cuarentena por sí sola está ‘acompañada en todas las épocas y bajo todos los regímenes políticos por una corriente subterránea de sospecha, desconfianza y disturbios'”, continuó en otro texto que también compartió en Twitter.
Esta reacción provocó que Reebok anunciara que “a finales de este año” cortará los lazos que mantenía desde hace una década como patrocinador principal de CrossFit y sus prendas.
“Recientemente, mantuvimos conversaciones para establecer un nuevo acuerdo”, pero “a la luz de los acontecimientos recientes hemos tomado la decisión de terminar nuestra sociedad“, expresó Reebok en un comunicado citado por medios estadounidenses.
Tras la ola de críticas compartidas en redes sociales, Greg Glassman se disculpó a través de la cuenta de la compañía y aseguró que se equivocó al elegir las palabras.
“Cuando vi que anunciaban una solución a nuestra crisis racial, me sentí incrédulo, enojado y demasiado emocionado. Involucrar el nombre de George Floyd en ese esfuerzo estuvo mal“, precisó ese directivo.