José Mourinho, reconvertido en ‘The Experienced One’ tras dejar atrás su mítico ‘The Special One’, cumplirá 1000 partidos como entrenador el próximo domingo 12 de septiembre cuando se reanude la Serie A. Se dice pronto, pero en toda la historia del fútbol mundial no han sido tantos los que han superado el millar de encuentros. Lejos quedan, por ejemplo, los 1.701 partidos dirigidos por su no tan amigo Arsène Wenger.
Es más, el luso tuvo la delicadeza de “estropear” el juego número 1.000 del francés como técnico de los ‘Gunner’; Mou, tan especial como siempre, le endosaría un contundente 6-0 como entrenador del Chelsea. Era solo uno más de sus muchos encuentros y desencuentros. Sin embargo, su mítica rivalidad llegó a su final… en los terrenos de juego. Arsène, ya retirado de los banquillos, ejerce como director de desarrollo de la FIFA: “el público y los jugadores quieren ver y competir en torneos de alto nivel y que les estimulen”, ha llegado a decir.
Sea como fuere, ¿le sucederá a él lo mismo? Parece improbable, aunque nunca se sabe. La Roma ha arrancado con buen pie en el campeonato doméstico con sendas victorias contra la Fiorentina y el Salernitana. Su próximo rival será el Sassuolo de Alessio Dionisi, equipo que (actualmente) ocupa la octava plaza de la Serie A.
Disfrutando de Roma
Mourinho, actual entrenador de la Roma, está aprendiendo a disfrutar de su nuevo hogar. Durante las últimas fechas se le ha visto disfrutar de algunos de los sitios más emblemáticos de la urbe italiana y/o de los propios aficionados, quien ya conocen el carácter y la personalidad del luso.
Es más, fue visto comiendo pizza tras su última victoria: “después de una bonita victoria, nada mejor que una pizza especial”, aseveró. Según cuenta Corriere dello Sport, el portugués tuvo a bien de hacerse fotos con los aficionados que le vieron por el lugar mientras le pedían que “les trajese el Scudetto” entre otras cosas. Mourinho, divertido, escuchó las demandas de los seguidores.
Una carrera de éxitos
José Mário dos Santos Mourinho Félix formó parte de varios equipos técnicos como segundo entrenador durante varios años. Su debut como primer entrenador fue en el Benfica, durante la temporada 2000-01, aunque poco después recalaría en el U.D. Leiria de Portugal. No obstante, su primer gran momento como entrenador llegó con el Porto, equipo con el que conquistó 2 Ligas de Portugal consecutivas, 1 Copa de Portugal, 1 Supercopa de Portugal, 1 Copa de la UEFA y su primera Champions League como técnico.
A partir de entonces aterrizó en otros grandes equipos, como el Chelsea (en dos etapas diferentes) o el Inter. De cualquier manera, es muy probable que uno de sus períodos en activo más destacados fuese en Madrid como entrenador del club blanco. Contratado para acabar con la hegemonía de Pep Guardiola, protagonizó una de las épocas más turbulentas del equipo capitalino; su rivalidad con el catalán ya es historia del fútbol.
Posteriormente, conquistando varios trofeos en el camino, pasó por el Manchester United y el Tottenham hasta aterrizar en la Roma, su actual equipo. Y es con estos últimos con los que, tras no menos de 20 años en los banquillos, cumplirá 1000 partidos como entrenador.
